El balance de comprobación es una herramienta esencial en la contabilidad empresarial. Este documento no solo verifica que los débitos y créditos estén equilibrados, sino que también asegura la exactitud de los registros financieros al prevenir y detectar errores. Además, proporciona una base fundamental para analizar la situación económica de la empresa, facilitar auditorías y la toma de decisiones.